No, si al final hay que agradecerles los sainetes que montan y esas frases rimbombantes y lapidarías que suelen quedarse en nada. ¿A quién íbamos a criticar? Les debemos más de lo que te imaginas. A mi me sacan la vena ácida. Por eso te los ponemos delante. Míralos con detalle y sacia tus bajos instintos. Esta semana de Debate sobre el Estado de la Nación, te presentamos un caso magistral: Llamazares. A pesar de ser el único diputado de Izquierda Unida en el Congreso acapara más titulares que grupos con más escaños. Descubre la razón.
(Llamazares y el don de la ubicuidad)No creo que se deba a que le bautizaron con el mismo nombre que a uno de los Reyes Magos. Aunque lo suyo parece obra de un prestidigitador sobrado de recursos. Su capacidad para multiplicarse se cuenta por comisiones. Revisas su hoja de servicios y se te desencaja la mandíbula. Suma 25 cargos entre vocalías, presidencias y ponente de las más variadas comisiones -grupos de trabajo que se forman en el Congreso de los Diputados alrededor de un asunto de interés-. Un ejemplo perfecto de hombre multitarea que lo mismo es presidente de la Comisión de Sanidad, Política Social y Consumo, que Vocal de la Delegación Española en el grupo de Amistad con Méjico. Así se entiende que vaya siempre corriendo. Le ves entrar en una de tantas comisiones, firmar para que se sepa que ha estado allí y salir escopetado a otra Sala cuando da la casualidad que coinciden.
Algunos de sus cargos generan complementos extra a su sueldo. Un punto que le echan en cara muchos de sus colegas ya que junto a Joan Herrera (ICV) ha sido uno de los diputados más beligerantes, hasta conseguir la reciente publicación de la actividad privada de sus señorías y en exigir cortar con los regalos. "Claro, como él está pluriempleado sin salir del Congreso, no necesita otros ingresos", es la frase recurrente cuando relacionas el polémico tema del sueldo y el nombre de Llamazares. Lo cierto es que expresarse con la rotundidad que practica este médico reconvertido en político, despierta recelos y sarcasmos entre sus homólogos de otros partidos. Creo haber pillado al vuelo más comentarios jocosos sobre Llamazares que sobre el resto. ¿Envidia?Su habilidad para que le citen los periodistas en sus artículos, incluso para figurar en más titulares que otros políticos más influyentes no esconde grandes secretos. 1º) No sólo se puede permitir el lujo de azotar a un Gobierno que ha agitado la bandera de los derechos sociales, sino que es su obligación como único representante de la izquierda en el Parlamento. Y la verdad es que no pierde ocasión. El pasado miércoles, El País, El Periódico de Catalunya o Público -el diario que sujeta en la foto- le dedicaron crónica. Y 2º) Siempre está disponible para ofrecer una opinión contrapuesta y argumentada en un lenguaje claro que destierra el habitual dialecto político de parece que digo algo, pero no digo nada.
En la elección de su vestuario es mucho más conservador que en sus palabras. No suele perdonar la corbata, preferentemente de rayas, y se ciñe con gusto el uniforme de traje oscuro para no destacar demasiado en la manada. Por eso cuando el FBI se empeñó en convertirlo en gemelo de Bin Laden, chirriaba la chilaba que se adivinaba en el primer plano falso. Él nunca se habría presentado con una en el hemiciclo.
Otros políticos con estilo propio:
El estilo de los políticos: Bibiana Aido
El estilo de los políticos: Ana Oramas
El estilo de los políticos: Celestino Corbacho
El estilo de los políticos: Esteban González Pons
El estilo de los políticos: Trinidad Jiménez
El estilo de los políticos: Cristobal Montoro
El estilo de los políticos: Mª Teresa Fernández de la Vega
El estilo de los políticos: José Luis Ayllón
El estilo de los políticos: Pepe Blanco
El estilo de los políticos: Soraya Saénz de Santamaría
El estilo de los políticos: Rosa Díez
El estilo de los políticos: Eduardo Madina
El estilo de los políticos: Josep Sánchez Llibre
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