Por Pilar Portero
El presidente del Congreso se ha retratado hoy como el señorito del Cortijo manchego que lleva dentro. La buscada bronca mediática que ha provocado por la defensa del uso de corbata como muestra de respeto y decoro ha servido en realidad para dejar en evidencia el sistema de clases que rige su vida. Él 'manda' a los ujieres -"hay que dar ejemplo a aquellos a los que mandamos", tal y como ha dicho, y a la vez, corre como un perrillo tras su amo, el todavía presidente del Gobierno. Así se ha producido el esperpento en vivo y en directo.Bono, retiene a Zapatero a la puerta de su coche. Show ante las cámaras |
Hoy el ministro de Industria, Miguel Sebastián, que promueve prescindir de la corbata para reivindicar la reducción del consumo energético subiendo la temperatura del aire acondicionado, contestaba a una pregunta de Beloki sobre la relación ente el ahorro energético y la corbata. Entonces, Bono, ha intervenido para opinar. Algo insólito en el presidente del Congreso. Le parecía necesario recalcar que la temperatura en el hemiciclo es superior a los 25º obligatorios por ley en los edificios públicos y echa en cara a Sebastián que el termómetro que él mismo le regaló, y sujeta en la mano, 'marca 27,5º'.
A la salida del pleno, el diputado socialista Álvaro Cuesta -que lleva un polo en lugar de camisa y corbata y que durante la bronca se ha quitado también la chaqueta en señal de protesta- se declara indignado por las palabras de Bono, sobre todo por la utilización de los ujieres y apunta que si la corbata resulta ser discriminatoria para el personal del Congreso "habrá que modificar el Reglamento". Pregunto a la ministra de Medio Ambiente, Rosa Aguilar: "A mi lo que me preocupa es la eficiencia energética y el ahorro pero también la igualdad de los ujieres".
Por supuesto, he preguntado a varios ujieres pero han optado por no entrar en la polémica generada por el presidente del Congreso.
Como contrapunto, unos minutos antes del momento corbata, yo hablaba con Bono sobre El Estilo de los Políticos, tratando de convencerle para que posara para mi. A lo lejos se ha percatado de que el presidente Zapatero abandonaba la zona de Gobierno para dirigirse al coche oficial que le esperaba en el patio. Nada más verle, Bono se ha puesto firme y ha salido escopetado detrás de él gritando "Presidente, presidente..." con una sumisión que nadie gasta, sobre todo desde que Zapatero renunció a presentarse de nuevo, mientras corría para que no se le escapara. Le ha alcanzado a punto de entrar en el coche y durante cinco minutos ha estado hablando con él mientras las cámaras registraban el encuentro. Todo un show encaminado a contemplar su nombre en los titulares.
Entre esto y lo del 75 aniversario de la guerra civil, se me ocurre otra palabra para Bono que no es precisamente "clasismo".
ResponderEliminarY abundando en lo que decía el otro día, si los gemelos son la cosa más estúpida que se puede poner un hombre (o una mujer, claro), la corbata sin duda es la segunda. Cero aportación, cero utilidad, incomoda, da calor y queda como el culo.